Sobre el hombre pesaba una medida de restricción de acercamiento a la víctima, por lo que fue imputado por desobediencia judicial y se solicitó el mantenimiento de su detención.
El sábado pasado a la madrugada, una mujer se comunicó con el Sistema de Emergencias 911 solicitando ayuda para su prima, que vive al frente de su vivienda en Orán, ya que estaba siendo golpeada por su expareja.
Al llegar los efectivos policiales, salía de la propiedad un hombre en aparente estado de ebriedad con la camisa con rastros de sangre y el pecho rasguñado, asegurando a los policías que se trataba de una discusión de pareja y que quería retirarse del lugar.
Al ingresar a la vivienda las fuerzas de seguridad, encontraron a una mujer con lesiones en el rostro y el labio. Al ser consultada, aseguró que su expareja le había propinado golpes de puño.
El hombre fue demorado y la mujer se comprometió a realizar denuncia en la Comisaría.
La fiscal Penal de Violencia Familiar y de Género de Orán, Soledad Filtrín Cuezzo, imputó provisionalmente al hombre de 29 años por el delito de desobediencia judicial dado que sobre él pesaba –desde octubre de 2020- una medida de restricción de acercamiento a su expareja en un perímetro de 300 metros. En tanto, la Fiscal solicitó al Juzgado de Garantías de Orán el mantenimiento de la detención del imputado hasta tanto declaren la mujer y su prima en sede fiscal y se realice un informe ambiental a fin de determinar la existencia de violencia de género.