Imputaron a la exintendenta de Coronel Moldes

Rita Carreras fue imputada mediante videollamada por precaución sanitaria. También fue imputado José Enrique Muñoz. Ambos se abstuvieron de declarar y cuentan con defensores privados.

Rita Carreras

El fiscal penal de la Unidad de Delitos Económicos Complejos, Leandro Flores, imputó a Rita Carreras por los delitos de fraude a la administración pública e incumplimiento de los deberes de funcionario público y a José Enrique Muñoz por el delito de fraude a la administración pública.

Las actuaciones iniciaron a partir de una denuncia realizada en febrero de 2020 por el actual intendente, Omar Carrasco, que puso en conocimiento que Carreras vendió en octubre de 2018, una cámara frigorífica del matadero municipal a Muñoz sin cumplir con las formalidades previstas y sin poner en conocimiento del Concejo Deliberante. Señaló, además, que pese a las ganancias y el trabajo que el matadero municipal generaba, la exintendente dispuso su cierre.

En el caso de Carreras, se le imputó la comisión del delito de fraude a la Administración Pública en calidad de autora, debido a que durante su gestión incumplió las normativas que regulan el sistema financiero y de gestión en orden al manejo de una administración pública municipal, en particular, disponiendo en forma discrecional de los recursos municipales –en este caso de una cámara frigorífica- sin observar tales normas y por un precio ínfimo, produciendo en consecuencia un grave perjuicio al erario municipal.

En relación al delito de Incumplimiento de los Deberes de Funcionario Público, advierte el fiscal que Carreras habría firmado un contrato de compraventa de un bien público municipal en contradicción a la Ley Nº 6838 referente al Sistema de Contrataciones de la Provincia de Salta.

Dicha normativa no fue cumplida por la gestión de la exintendenta, puesto que no se realizó ningún procedimiento que norma la ley de contrataciones, la venta se desarrolló en forma directa, sin la realización de una estructura de costos, o estudio de precios actuales y representativos del bien en el mercado, como tampoco se dio cumplimiento a las disposiciones generales de la ley y al Decreto Reglamentario, tal como lo establece el art 58º del mismo.

Respecto a Muñoz, se lo consideró coautor del delito de fraude a la administración pública, ya que mediante una operación de compraventa con la municipalidad de Coronel Moldes y sin observar los procedimientos correspondientes, logró la disponibilidad de una cámara frigorífica de propiedad de aquélla, por una suma irrisoria, contribuyendo con su conducta a la pérdida del objeto mismo del fraude, perteneciente a la administración pública, lo que resultó en un grave perjuicio económico para el erario de la municipalidad de Coronel Moldes.

Las audiencias de imputación se concretaron la semana pasada y en el caso de Carreras, se realizó mediante videollamada por precaución sanitaria. Ambos imputados son asistidos por abogados particulares y se abstuvieron de declarar.

Imputaron al exintendente de El Quebrachal por fraude, malversación e incumplimiento

La Unidad Fiscal conformada por los fiscales penales María Celeste García Pisacic y Leandro Flores, imputó a Leonardo Fabián García, acusado de los delitos de fraude a la administración pública, malversación de caudales públicos e incumplimiento de los deberes de funcionario público, todo en concurso real. El exjefe comunal de El Quebrachal, se presentó este viernes a la audiencia asistido por su defensa y se abstuvo de declarar. Los fiscales no descartaron una eventual ampliación de la imputación.

Del decreto de imputación, surgió que García, en su carácter de funcionario público, durante su gestión como intendente de la Municipalidad de El Quebrachal, incumplió de forma reiterada las normativas que regulan el sistema financiero y de gestión, en orden al manejo de una administración pública municipal.

Así, se desprendió que el exjefe comunal dispuso en forma discrecional de los recursos municipales sin observar tales normas, lo que produjo un grave perjuicio al erario municipal. La falta de cumplimiento a los regímenes normativos vigentes facilitó la discrecionalidad del manejo de tales fondos públicos.

En relación al delito de fraude a la administración pública, el imputado desarrolló tareas tendientes a privar a la administración pública de diversos bienes de su propiedad, al disponer de ellos en beneficio propio y de terceros.

De análisis contables, surgieron diversas irregularidades, tales como la utilización de dinero para solventar la campaña en época electoral. Es decir, que se desviaron fondos del presupuesto del municipio para fines personales, para beneficio propio y para llevar a cabo actos políticos destinados a la campaña electoral.

Por otro lado, se comprobó que García celebró un contrato de manera directa con una librería, cuyo propietario era un empleado público que prestaba sus servicios en la propia municipalidad. En el expediente figura una orden de pago con fecha del 15 de noviembre de 2019, a nombre de ese beneficiario y con imputación del gasto en partida presupuestaria “Útiles de Escritorio, Oficina y Enseñanza”, por un importe de $111.458 y con cheque como medio de pago.

El importe de los comprobantes adjuntos sumó $95.265, lo que implica que se abonó una suma mayor a la de la documentación de respaldo, es decir, que faltaron comprobantes por un monto de $16.193. Al realizar la consulta en la página de AFIP, no se pudo obtener la validación, ya que todos los comprobantes arrojaron el mismo error. Tampoco se advirtió la realización de un procedimiento de contratación para la adquisición de los insumos de oficina, dado que el importe acumulado de las facturas indicó que se debería haber realizado una adjudicación simple y no una contratación directa o abreviada.

Por otra parte, según el análisis de otra orden de pago, surgió como beneficiario un “proveedor genérico”, con una imputación del gasto que se efectuó en la partida presupuestaria “Ayuda Social a Personas”. En este sentido, existen irregularidades, como la falta de identificación del proveedor, la ausencia de remito o acta de recepción del bien adquirido e inconsistencias entre la fecha de la factura y la fecha de la orden de pago.

En otro caso, el pago de honorarios a una persona, se efectuó a través de la imputación del gasto en la partida presupuestaria “Servicios Jurídicos” y se advirtió que se pagó en efectivo y que se facturó dos veces el mismo periodo de marzo de 2019.

Además, al realizar el análisis de las facturas presentadas, pudo divisarse como modus operandi, la intención de justificar los gastos realizados, toda vez que las facturas, en los casos explicados, o no son válidas, o no son correlativas y fueron completadas todas con una misma fecha. También se realizaron diversos pagos diferidos que comprometieron el erario municipal, cuya administración correspondía a la gestión siguiente.

En relación al delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público, se observó que todos los cheques detallados en las órdenes de pago analizadas, son cheques de cobro diferido, con fecha de pago a partir del 10 de enero de 2020, lo que implicó que la erogación efectiva de fondos afectó el presupuesto financiero 2020.

En segundo lugar, el medio de pago utilizado contrarió lo normado por la Ley Antievasión, que establece que los pagos totales o parciales de sumas de dinero superiores a $ 1000 o su equivalente en moneda extranjera, deberán realizarse de acuerdo a los siguientes medios: depósitos en cuentas de entidades financieras, giros o transferencias bancarias, cheques o cheques cancelatorios, tarjeta de crédito, compra o débito, factura de crédito y otros procedimientos que expresamente autorice el Ejecutivo Nacional. En este sentido, se detectó la falta de realización del procedimiento de contrataciones, acorde a lo estipulado por la Ley de Contrataciones, por una adquisición de magnitud de $572.150 que se debería haber efectuado por medio de una licitación pública nacional.

Por último, el 1 de febrero de 2019, aún durante su gestión, el acusado recibió dinero proveniente de fondos provinciales para la realización de una obra de agua potable en Gaona, con un anticipo de $ 316.043,58, mientras que el 15 de mayo del mismo año, recibió fondos para obra de red de agua potable para barrio Evita, con un presupuesto de $ 735.222,12; todo comprobado por los extractos bancarios adjuntados en la causa y sin llevar a cabo las obras mencionadas ni justificar el destino del dinero; a pesar de haber sido intimado en tres oportunidades para el comienzo de la realización de cada obra.

De lo expuesto, se tuvo que García, en su carácter de funcionario público y al tener en consecuencia la administración y custodia de los caudales públicos, no dio al dinero depositado el destino asignado para la realización de las obras públicas para el municipio que gestionaba.

Gral. Güemes: imputaron a la exdirectora de Cultura por peculado

A partir de la denuncia realizada por el actual intendente ante irregularidades detectadas en la auditoría interna realizada en el municipio al asumir su función, se inició una investigación donde se pudo comprobar que la exfuncionaria sustrajo fondos que tenía a cargo, sin efectuar la rendición correspondiente, causando un perjuicio patrimonial al municipio.

Gentileza Canal 4 SCA

El fiscal penal de la Unidad de Delitos Económicos Complejos, Leandro Flores, imputó a Mónica Fernanda Valdiviezo como autora del delito de peculado.

La investigación se inició a partir de la denuncia que presentó el intendente de General Güemes, Sergio Salvatierra, donde consignaba irregularidades detectadas en la auditoría interna realizada en el municipio, irregularidades en el manejo de fondos del centro cultural y el faltante de algunos archivos.

Tras el análisis de la documentación aportada y la recepción de testimonios de las personas encargadas de realizar las tareas de auditoría, desde la Unidad de Delitos Económicos Complejos, se pudo comprobar que Valdiviezo, en su carácter de Directora de Cultura de ese municipio durante la gestión de gobierno anterior, tenía a su cargo el manejo y cuidado de fondos públicos y que sustrajo caudales estatales pertenecientes al Centro Cultural 13 de Febrero sin efectuar la correspondiente rendición de cuentas de los ingresos que se producían por actividades en el cine y las ventas en el bar. De la rendición de fondos del año 2019, la suma de $ 807.208,23 se encuentra sin respaldo documental alguno, lo que causó un perjuicio patrimonial al Municipio.

Tras conocer la acusación en su contra, Valdiviezo se abstuvo de declarar.

Licencias de conducir: ampliaron las imputaciones contra los acusados

El fiscal penal de la Unidad de Delitos Económicos Complejos, Leandro Flores, amplió las imputaciones contra los acusados en el marco de la investigación iniciada tras distintas denuncias por la entrega irregular de licencias de conducir por parte de la exsubsecretaría de Tránsito y Seguridad Vial de la Municipalidad de Salta y de la actual Subsecretaría de Movilidad Ciudadana.

Con los elementos entonces colectados en la investigación, la Unidad de Delitos Económicos Complejos entendió oportunamente en junio del corriente año, que los acusados e imputados por el delito de asociación ilícita, participaron activamente de las maniobras y que no se trató de hechos aislados, ya que surgió claramente que sin la participación de todos en forma mancomunada, no se hubiera podido cometer el objetivo de llegar a la obtención irregular de las licencias de conducir de diversos ciudadanos a cambio de dinero.

La ampliación de la imputación concurrió entonces en forma real con la imputación ya formulada el 2 de junio del corriente, respecto de los encausados y de la siguiente manera:

El acusado Javier Fernando Martínez, fue imputado por el delito de fraude en perjuicio de la administración pública, concusión –12 hechos- y falsedad material del instrumento público, en concurso real. Se desprendió del decreto de imputación que en el año 2017, con abuso de la función desempeñada como funcionario público municipal en la Subsecretaría de Tránsito y Seguridad Vial, Martínez requirió sumas de dinero a distintos contribuyentes, a quienes les entregó licencias de conducir falsas, creadas sin que aquéllos cumplimenten los requisitos legales ni se observara el procedimiento previsto para la obtención de dichas licencias, y sin que abonen los tributos para el trámite, lo que generó un importante perjuicio patrimonial a la Hacienda Municipal.

Los acusados Marianela Castro y César Martín Ganami, fueron imputados por los delitos de concusión y falsedad de instrumento público -2 hechos-, en carácter de partícipes necesarios, por captar en la vía pública a dos personas, a quienes les pidieron dinero para que, por medio de funcionarios municipales, se realizara el trámite de obtención de licencia de conducir sin los requisitos previstos.

En tanto, la acusada Carmen Nieves Campos, fue imputada por los delitos de falsedad de instrumento público -23 hechos- y concusión -1 hecho- en concurso real, ya que en su calidad de funcionaria pública municipal de la Subsecretaria de Tránsito y Seguridad Vial, consignó como aprobados 23 exámenes de licencia de conducir, que no se encontraban en condiciones de ser aprobados, a pesar de lo cual se emitió la correspondiente licencia, cuyos legajos fueron secuestrados.

Por otra parte, la acusada Gabriela Anahí Dagum, fue imputada por el delito de falsedad de instrumento público –7 hechos- y concusión -3 hechos – en concurso real, toda vez que la mencionada, en su calidad de funcionaria pública municipal de la Subsecretaria de Tránsito y Seguridad Vial, consignó como aprobados siete exámenes teóricos de licencia de conducir, los cuales no se encontraban en condiciones de ser aprobados, a pesar de lo cual se emitió la correspondiente licencia.

En relación al acusado José Fernando Vieria, fue imputado por el delito de falsedad de instrumento público –41 hechos- en concurso real, ya que en su calidad de funcionario público municipal de la Subsecretaria de Tránsito y Seguridad Vial, consignó en las planillas del Canchón Municipal que 41 ciudadanos aprobaron sin verificarse el ingreso del vehículo para el examen práctico.

El acusado Juan Carlos Conte, fue imputado por el delito de falsedad de instrumento público–47 hechos- en concurso real, toda vez que el mencionado, en su calidad de funcionario público municipal de la Subsecretaria de Tránsito y Seguridad Vial, consignó como aprobados exámenes prácticos de licencias de conducir, que no se encontraban en condiciones de ser aprobados, a pesar de lo cual se emitió la correspondiente licencia; como así también consignó en las planillas del Canchón Municipal que 41 ciudadanos aprobaron sin verificarse el ingreso del vehículo para el examen práctico.

Los acusados Ricardo Martín Miguel Nina, Julio Federico Barrientos Herrera y Ariel Ramiro Ruiz, fueron imputados por el delito de concusión, ya que se desprendió que abusaron de su cargo de funcionarios públicos municipales y solicitaron la entrega de dádivas para la realización de trámites ante el Organismo, con lo que convirtieron en provecho propio las sumas de dinero recibida y actuaron ilícitamente al requerir a los contribuyentes dinero para la obtención de la licencia de conducir, función para la cual no están facultados a recibir.

Por último, Griselda del Valle Royano, fue imputada por el delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público, ya que la mencionada omitió controlar la regularidad en el procedimiento y posterior confección de las licencias de conducir, expedidas sin cumplimentar los requisitos legales, lo que debió realizar en su función de Directora de Educación Vial de la Subsecretaria de Tránsito y Seguridad Vial.

Estafó al vendedor de una camioneta con un cheque

El fiscal penal Leando Flores, imputó a Adrián Antonio Vera por videoconferencia por el delito de estafa. En el mes de marzo, adquirió una camioneta con un cheque cuya cuenta se encontraba cerrada desde 2017. El acusado se encuentra detenido en Buenos Aires por una causa federal vinculada al robo de caños de un gasoducto en el Norte de la provincia de Salta.

El fiscal penal de la Unidad de Delitos Económicos Complejos, Leandro Flores, formalizó el pasado miércoles 9 de setiembre, la audiencia de imputación mediante videoconferencia de Antonio Adrián Vera por el delito de estafa.

La denuncia fue radicada por un hombre que estaba encargado por un amigo, de la venta del vehículo. Relata que publicó la oferta mediante la red social Facebook y fue contactado por Messenger por Vera, quien demostró interés y ofreció pagarla con un cheque que estaba a nombre de una empresa con solvencia.

Tras un intercambio de mensajes por Whatssapp, el vendedor verificó que la misma no presentaba cheques rechazados y concretaron la operación en su domicilio con un boleto compra venta .

Al presentarse a cobrar el cheque en la entidad bancaria, se dio con la noticia que la cuenta a la que pertenecía, había sido cerrada en 2017.

Tras la denuncia y tareas investigativas, el vehículo fue localizado en la localidad de General Mosconi y se procedió a su secuestro.

Se investiga la organización de bingos virtuales ilegales

A partir de la denuncia realizada por el presidente del Directorio del Ente Regulador de Juegos de Azar, la Unidad de Delitos Económicos Complejos inició una investigación sobre un grupo de personas que organizaban a través de Facebook, la realización de un bingo virtual. Se realizaron 10 allanamientos con secuestro de elementos de interés para la causa.

El fiscal penal de la Unidad de Delitos Económicos Complejos, Leandro Flores, encabeza una investigación iniciada a partir de la denuncia realizada por Aníbal Osvaldo Caro, como presidente del Directorio del Ente Regulador de Juegos de Azar sobre un grupo de personas que estaría organizando un bingo virtual en forma ilegal.

La División de Delitos Económicos de la Policía de la Provincia inició tareas investigativas y pudo comprobar que a través de Facebook, un grupo de personas estaba organizando un bingo virtual ofreciendo premios en efectivo, violando las regulaciones fiscales, administrativas y penales relativas a la realización de juegos de azar

En las publicaciones indicaban diversos números de CBU como medio de pago para participar y números de teléfono de contacto para reservar “las líneas”.

Reunidos los elementos de convicción necesarios, el fiscal Flores solicitó al Juzgado de Garantías 1, orden de allanamiento y secuestro para 10 domicilios vinculados a los sospechosos y como resultado de la medida, se logró secuestrar diversos elementos de interés para la causa.

Irán a juicio por estafar con la venta de terrenos y viviendas

Desde la Unidad de Delitos Económicos Complejos, se requirió juicio para dos hombres y una mujer, que bajo el nombre de la empresa Ecovista, ofrecían a través de publicidad masiva, la posibilidad de adquirir terrenos y/o viviendas que nunca entregaron. Son 24 los damnificados que radicaron denuncia.

El fiscal penal de la Unidad de Delitos Económicos Complejos, Leandro Flores, requirió juicio para Francisco Marcelino Alfaro, Marcos Sebastián Alfaro y Justina Chaile como coautores del delito de estafa (24 hechos).

En la investigación consta que los acusados, actuando de común acuerdo y mostrándose como titulares de una empresa solvente y responsable de diversos loteos y construcción de viviendas -Proyectos Urbanístico Los Arcos y Palmares de la Isla-, ofrecían a través de publicidades masivas la posibilidad de adquirir lotes y/o viviendas.

Luego suscribían un contrato con los interesados, solicitando distintas sumas de dinero, a sabiendas de que no cumplirían con lo pactado.

El modus operandi de los acusados consistía en hacer suscribir a las victimas un plan de pagos (“Ecoplan”) o un contrato de adhesión al Fideicomiso “Los Arcos” por el cual debían pagar cuotas mensuales ajustadas a un índice de aumento salarial para la adquisición del lote.

El ardid se completaba a través del montaje de una infraestructura suficiente como para otorgar visos de legitimidad al negocio propuesto. Asimismo, para perfeccionar el engaño se certificaba la firma de los compradores por medio de un escribano que era propuesto por los imputados y se trasladaba a los interesados en autos de la empresa a distintas locaciones para mostrarle supuestos barrios que se encontraban urbanizando, lo que no era cierto.

Como evidencia del engaño desplegado por los imputados, en el requerimiento se encuentran incorporados los informes de las empresas Gasnor, Edesa y Aguas del Norte, que dan cuenta de las respuestas negativas acerca de proporcionar los servicios básicos en los lotes que los imputados ofrecían al público. En este sentido, se observa que éstos iniciaron los trámites en las mencionadas empresas a los efectos de otorgar una apariencia de viabilidad y legitimidad al futuro loteo, sin embargo éstos fueron discontinuados.

Tampoco obran registros en la Dirección General de Inmuebles acerca de loteos o urbanizaciones aprobadas con los nombres “Los Arcos” o “Palmares de la Isla”.

Se demuestra también que se trata de un mismo grupo de acción, donde figuran como titulares de la sociedad “Ecovista”, Francisco Marcelino Alfaro, Justina Chaile y Marcos Sebastián Alfaro, con distribución de tareas para lograr el cometido defraudatorio.

Pareja a juicio por estafar con supuestas inversiones on line

Desde la Unidad de Delitos Económicos Complejos se requirió juicio para una pareja acusada de al menos cuatro hechos de estafas reiteradas. Ofrecían a sus conocidos la oportunidad de invertir en una plataforma informática brasilera y lograr grandes ganancias en dólares o la obtención de piedras preciosas. Incluso los instaban a sumar a otros adherentes para tener mayores posibilidades.

El fiscal penal de la Unidad de Delitos Económicos Complejos, Leandro Flores, requirió juicio para Juan Carlos Nieva y Ivanna Elizabeth Correa como coautores del delito de estafas reiteradas (4 hechos).

En las denuncias, los damnificados son coincidentes en señalar que eran compañeros de trabajo en el Ministerio de Educación de Salta con el acusado y que basados en la relación de confianza, decidieron invertir importantes sumas de dinero en una empresa virtual denominada “Pay Diamond”.

Para concretar la maniobra, la pareja concertaba encuentros en hoteles de la ciudad y en su misma casa, donde les prometían a los damnificados, grandes rentabilidades dinerarias o su equivalente en piedras preciosas si invertían sumas de dinero, como así también si adherían a nuevos suscriptores o inversores.

Cabe señalar que nunca otorgaron recibo alguno del dinero que recibieron de los damnificados y sus familiares, quienes al intentar retirar su inversión se vieron imposibilitados ya que la plataforma desconocía el acceso a los suscritos.

El fiscal Flores sostiene en la acusación que los imputados Nieva y Correa, actuando en connivencia y aparentando la dirección u organización de una empresa virtual, lograron que los denunciantes entregaran importantes sumas de dinero en efectivo –pesos y/o dólares-, creyendo que se trataba de una operación de inversión. Actuando los acusados a sabiendas que no iban a cumplir con las promesas de ganancias, lo que perjudicó gravemente el patrimonio de las víctimas, constituyendo un caso de estafa piramidal.

A juicio por estafar con la construcción de piletas de natación

Un hombre de 40 años será llevado a juicio por al menos seis hechos de estafa en perjuicio de personas con las que suscribió un contrato ante escribano público para construir piletas de natación. Invocaba ser ingeniero civil y en general, realizaba trabajos iniciales y luego desaparecía.

El fiscal penal de la Unidad de Delitos Económicos Complejos, Leandro Flores, requirió juicio ante el Juzgado de Garantías 4 para José Antonio Santillán como autor del delito de estafas reiteradas (6 hechos).

Según consta en el requerimiento, Santillán, invocando el carácter de ingeniero civil, publicitaba por Facebook, la venta e instalación de piscinas. Para ello, suscribió contratos de locación de obras ante escribano público y logró que los damnificados le abonaran diferentes sumas de dinero según las características de lo contratado. Una vez abonados los importes solicitados, el acusado realizó trabajos iniciales para luego abandonar de manera intempestiva las obras, y en otros casos no efectuó ningún tipo de trabajo.              

Incluso, Santillán, aportó datos personales falsos a los denunciantes, al momento de celebrar los respectivos contratos, todo lo cual evidencia su intención inicial de no ser ubicado ante los reclamos de los damnificados.      

A juicio por estafar con la venta de viviendas prefabricadas

Un hombre de 41 años será llevado a juicio por al menos doce hechos de estafa. El acusado tenía en calle Olavarría al 1000 un lugar donde comercializaba la construcción de viviendas prefabricadas que nunca realizó. A uno de los damnificados incluso llegó a coaccionarlo.

El fiscal penal de la Unidad de Delitos Economicos Complejos, Leandro Flores, requirió juicio ante el Juzgado de Garantías 5 para Juan Sebastián Segovia como autor del delito de estafas reiteradas (12 hechos) y coacción en concurso real.

En el requerimiento consta que el acusado era titular de una empresa dedicada a construir viviendas prefabricadas, utilizando distintos nombres y que se promocionaba en distintos medios de comunicación y redes sociales bajo la apariencia de una empresa seria y confiable.

Segovia suscribió con la mayoría de los denunciantes, un contrato para la construcción de viviendas prefabricadas, en los cuales consignaba la obra proyectada y el plazo de entrega, todo lo cual generaba confianza en las víctimas, quienes entregaron importantes sumas de dinero.

Las víctimas concurrían a la oficina ubicada en calle Olavarría al 1100 y al ser asesorados sobre las características de la construcción, el precio y demás detalles de las viviendas, es que concertaban las operaciones respectivas.

Pese a que los denunciantes cancelaron el precio convenido, llegado el momento de entrega de las viviendas, estas no fueron instaladas en los lugares indicados por los adquirentes, recibiendo solamente de parte del encartado excusas pretendiendo justificar la tardanza e incumplimiento de los contratos suscritos

Se pudo verificar además que los recibos que brindaba, no reunían los requisitos formales exigidos por los organismos de recaudación fiscal, por cuanto la firma no se encuentra inscripta, lo que da cuenta de que se trata de una empresa inexistente en términos tributarios y legales, y sin solvencia económica.

Incluso, uno de los damnificados denuncia que cuando interpeló al acusado para que cumpla lo pactado, lo amenazó de muerte.