General Güemes: Condenados por dos hechos de robo y hurto

Martín Alejo Cuevas, de 20 años, y Agustín Renato Fernández, de 21 años, fueron condenados por dos hechos en los que cometieron los delitos de robo, hurto y violación de domicilio.

El fiscal penal de General Güemes interino, Gabriel González, en acuerdo con la defensa de los imputados, solicitó ante la Sala I del Tribunal de Juicio distrito Centro, la aplicación de juicio abreviado.

La jueza interina Paola Marocco, luego de que los acusados aceptaran los hechos que se les imputan, impuso una pena de cinco años y ocho meses de ejecución efectiva para Martín Alejo Cuevas por los delitos de robo simple, hurto simple y violación de domicilio, en concurso ideal, y seis meses de ejecución condicional para Agustín Renato Fernández por los delitos de hurto simple y violación de domicilio, en concurso ideal.

Respecto a la conducta desplegada por Martín Alejo Cuevas, de las actuaciones surge que el 9 de agosto de 2020, en circunstancias que la damnificada pasaba junto a su esposo por su vivienda en construcción, observó que el acusado, luego de violentar una ventana, sustrajo varias barras de hierro y las llevó a su domicilio.

La denunciante dio aviso al Sistema de Emergencias 911 y, al cabo de unos minutos, efectivos policiales se hicieron presentes en el domicilio de Cuevas, lograron su aprehensión y el secuestro de los elementos sustraídos.

En cuanto a los delitos de hurto simple y violación de domicilio, el día 10 de febrero de 2021, en un domicilio de barrio Los Olivos, el acusado se llevó un celular que estaba en la mesa de luz del damnificado y se retiró corriendo. Al salir a la calle el denunciante con intención de atrapar a Cuevas, vio a Fernández que, junto con el otro acusado, se daban a la fuga y dio aviso al Sistema de Emergencias 911, logrando la detención de los dos acusados.

Juicio a dos mujeres policías: El lunes 24 se conocerá el veredicto

Tras un cuarto intermedio, este viernes se reanudó la audiencia de debate contra dos mujeres policías, acusadas por un hecho ocurrido en 2018, cuando una mujer sufrió una fractura al ser reducida en un procedimiento policial. Hoy finalizó la ronda de alegatos.

El fiscal de Derechos Humanos, Gabriel González, solicitó la condena para la agente Judith Villanueva y la sargento ayudante Silvia Martínez, por considerarlas coautoras de los delitos de vejaciones calificadas, agravadas por el uso de la violencia y lesiones graves, agravadas por la función policial y la pena de 3 años de ejecución condicional, con prohibición de acercamiento a la víctima. Además, la inhabilitación especial para ejercer cargos en las fuerzas de seguridad del Estado por el doble de tiempo que dure la condena.

Durante los alegatos, el fiscal González solicitó que se valore el hecho en el contexto de violencia institucional por parte de las fuerzas de seguridad policial del Estado, que le produjo lesiones de gravedad a la víctima. Pidió, además, que el testimonio de esta última también sea analizado en ese contexto, al igual que toda la prueba recibida.

Para ello, la Fiscalía de Derechos Humanos hizo la valoración de toda la prueba producida, los testimonios directos, indirectos e inmediatos.

Por otro lado, el fiscal González recordó que, oportunamente, se solicitó la remisión de copias a la Fiscalía Penal 1 por el posible delito de falso testimonio cometido en audiencia, del hoy Comisario Arias, que en aquel entonces revestía el cargo de suboficial principal, por parte del Ministerio Público Fiscal y de la defensa.

Al finalizar los alegatos, tanto de la fiscalía como de la defensa, la jueza Gabriela González dispuso un cuarto intermedio hasta el lunes 24 de octubre, para dar a conocer el veredicto.

Los hechos

El hecho ocurrió el 4 de febrero de 2018 cuando la víctima fue agredida físicamente por personal policial femenino que se encontraba prestando servicio en el local bailable “Carpa El Gaucho La Florida”, de la localidad de La Merced. 

La denunciante se encontraba esperando el colectivo frente a la carpa sobre Ruta 68, cuando observó que había un incidente entre varias personas que se encontraban en el lugar y en el que intervino personal policial.

Al ver que el incidente se desplazaba hacia donde se encontraba junto a su pareja, le pidió a los efectivos que pararan. Fue entonces cuando una policía de sexo femenino le dijo que se retirara. Cuando procedían a abandonar el lugar, sintió que la tomaron del brazo izquierdo con fuerza, haciéndoselo hacia atrás, queriéndola reducir. En ese momento le propinaron un golpe de puño en el brazo desde atrás, e inmediatamente sintió un fuerte dolor.

La situación provocó a la víctima “el quiebre del brazo izquierdo (húmero por torsión), usando una fuerza desproporcionada y mayor a la requerida para la reducción de la víctima”, corroborado por el informe de Medicina Legal del Cuerpo de Investigadores Fiscales (CIF). 

Caso Jimena Salas: El perfil genético de uno de los imputados fue confirmado en 13 muestras recogidas en la escena

En un informe parcial se había acreditado la coincidencia del perfil genético de uno de los imputados con el perfil genético identificado como H1 en la causa y a través de un informe final, se lo pudo individualizar en distintas muestras recogidas de la vivienda de barrio San Nicolás en la localidad de Vaqueros. Cabe recordar que los tres imputados permanecen detenidos con prisión preventiva.

Del avance de las tareas investigativas, la Unidad Fiscal que investiga el homicidio calificado de Jimena Beatriz Salas, comunicó que el informe final elaborado por el Servicio de Biología Molecular del CIF y con la intervención de una perito de control designada por la defensa de los detenidos, señala que el perfil genético de uno de los tres imputados por el hecho, se encuentra presente en 13 muestras de las recogidas en la escena del crimen, lo que se suma a los ya analizados en el informe anterior.

También señalaron que en la causa se incorporaron informes solicitados a distintas entidades que fueron requeridos y se agregaron análisis e informes elaborados por el equipo especial de investigación que se encuentra afectado a la causa.

De las pruebas colectadas, los integrantes de la Unidad Fiscal sostienen la acusación realizada a los tres hombres detenidos e imputados en forma provisional como coautores del delito de homicidio calificado por alevosía, ensañamiento, criminis causa, por el concurso premeditado de dos o más personas y femicidio en perjuicio de Jimena Beatriz Salas.

Últimas instancias del juicio a dos mujeres policías por lesiones graves y vejaciones agravadas

Dos mujeres que se desempeñaban en la Policía de la Provincia, son juzgadas por un hecho ocurrido en 2018, cuando una mujer sufrió una fractura, mientras era reducida en un procedimiento policial. Ayer jueves declararon testigos y según lo previsto, el próximo martes se producirán los alegatos.

El fiscal penal de Derechos Humanos, Gabriel González, representa al Ministerio Público Fiscal ante la Sala III del Tribunal de Juicio del distrito Centro, en la audiencia de debate contra la agente Judith Villanueva y la sargento ayudante Silvia Martínez, como autoras de los delitos de lesiones graves agravadas por el uso de violencia en calidad de funcionario público y vejaciones agravadas por el uso de violencia en calidad de funcionario público, todo ello en concurso ideal.

Este jueves se produjo una nueva ronda de testimoniales, . Según dispuso la jueza Gabriela González, el martes 18 se dará lugar a los alegatos de las partes y se espera conocer el veredicto al finalizar la jornada.

El hecho juzgado ocurrió el 4 de febrero de 2018 cerca de la medianoche en “Carpa El Gaucho La Florida”, de la localidad de La Merced, cuando la denunciante fue agredida físicamente por personal policial femenino que se encontraba prestando servicio en el local bailable.

La situación provocó a la víctima “el quiebre del brazo izquierdo (húmero por torsión), usando una fuerza desproporcionada y mayor a la requerida para la reducción de la víctima”, corroborado por el informe de Medicina Legal del Cuerpo de Investigadores Fiscales (CIF).

En la primera jornada de audiencia del miércoles 12, declaró la víctima y ratificó los dichos manifestados anteriormente, señalando que reconoció a las personas que la habían agredido y explicó cómo se produjo la situación generada.

Conforme a su declaración, el día del hecho se encontraba esperando el colectivo cuando vio que personal policial agredía a un masculino. Ella quiso tomar intervención para que cesaran con la agresión y fue ahí cuando efectivos se dirigieron hacia ella, la redujeron y trataron agresivamente, golpeándola en el brazo. Estos dichos fueron luego ratificados por otro testigo que se encontraba en el lugar y que presenció lo sucedido.

En la misma jornada también prestó testimonio el hombre que estaba siendo reducido en ese momento, y ambos testigos ratificaron además, que vieron a la damnificada llorando en la comisaría.

En tanto, durante la segunda jornada de la audiencia de debate, prestó declaración el médico que la asistió, brindando precisiones acerca de la lesión que presentaba la mujer agredida: fractura de húmero, tipo oblicua, compatible con un movimiento de fricción e impacción (fractura o rompimiento del hueso de un miembro en diversas partes, que forma un bulto o alguna imperfección).

También prestó declaración testimonial un comisario que se desempeñaba como jefe de servicio, tras lo cual defensa y fiscalía solicitaron que se remita copia a la Fiscalía Penal 1 para la investigación de la posible comisión del delito de falso testimonio durante la audiencia, a lo que la jueza hizo lugar.

Posteriormente declaró otro personal policial que confirmó la demora de la damnificada el día de los hechos, pero dijo no recordar la secuencia del hecho.

La imputada Judith Villanueva solicitó declarar y manifestó haber apoyado la mano en el hombro a la víctima. Dijo que no forcejeó con ella, y que cuando procedió a demorarla estaba tranquila, aclarando que quien la había reducido fue un oficial superior.

Para la jornada de este viernes está prevista la declaración del médico del CIF y otros efectivos policiales que prestaban servicio en la carpa, y el próximo martes se desarrollarán los alegatos y se dará a conocer la sentencia.

Inicia juicio a dos mujeres policías por lesiones graves y vejaciones agravadas

Desde el miércoles 12, se juzgará a dos efectivas de la Policía de la Provincia por un hecho ocurrido en 2018, cuando una mujer sufrió una fractura producto de haber sido reducida en un procedimiento policial.

El fiscal penal de Derechos Humanos, Gabriel González, representará al Ministerio Público Fiscal ante la Sala III del Tribunal de Juicio, Distrito Judicial Centro, en la audiencia de debate contra la agente Judith Villanueva y la sargento ayudante Silvia Martínez como autoras de los delitos de lesiones graves agravadas por el uso de violencia en calidad de funcionario público y vejaciones agravadas por el uso de violencia en calidad de funcionario público, todo ello en concurso ideal.

Según declaró la damnificada, quien en ese momento contaba con 26 años de edad, el hecho ocurrió el 4 de febrero de 2018 cerca de la medianoche cuando fue agredida físicamente por personal policial femenino que se encontraba prestando servicio en el local bailable “Carpa El Gaucho La Florida”, de la localidad de La Merced.

Conforme a su relato, la denunciante se encontraba esperando el colectivo frente a la carpa sobre Ruta 68, cuando observó que había un incidente entre varias personas que se encontraban en el lugar y en el que intervino personal policial.

Al ver que el incidente se desplazaba hacia donde se encontraba junto a su pareja, le pidió a los efectivos que pararan. Fue entonces cuando una policía de sexo femenino le dijo que se retirara. Según relata, cuando procedían a abandonar el lugar, sintió que la tomaron del brazo izquierdo con fuerza, haciéndoselo hacia atrás, queriéndola reducir. En ese momento le propinaron un golpe de puño en el brazo desde atrás, e inmediatamente sintió un fuerte dolor.

El fiscal González, al momento de elevar el requerimiento a juicio, entendió que existen elementos suficientes para imputar a la agente Judith Villanueva y a la sargento ayudante Silvia Martínez por los delitos de lesiones graves agravadas por el uso de violencia en calidad de funcionario público y vejaciones agravadas por el uso de violencia en calidad de funcionario público, todo ello en concurso real, toda vez que ambas, ostentando su calidad de funcionario público y en cumplimiento de una función del servicio que le es propio, excedieron la fuerza necesaria para el ejercicio de la acción de reducción.

La situación provocó a la víctima “el quiebre del brazo izquierdo (húmero por torsión), usando una fuerza desproporcionada y mayor a la requerida para la reducción de la víctima”, corroborado por el informe de Medicina Legal del Cuerpo de Investigadores Fiscales (CIF).

La audiencia de debate pública será presidida por la jueza Gabriela González y está previsto que se desarrolle durante los días 12, 13 y 14 de octubre, a las 9 de la mañana.

Metán: Se investiga de oficio un hecho de presunta violencia institucional

A partir de lo manifestado por el familiar de un interno de la Unidad Carcelaria, el fiscal penal de Derechos Humanos, Gabriel González, inició actuaciones de oficio para determinar lo sucedido.

La Fiscalía Penal de Derechos Humanos, a través de su Secretaría de Metán, Distrito Judicial del Sur, inició de manera inmediata actuaciones de oficio, al tomar conocimiento de un hecho de posible violencia institucional dentro de la Unidad Carcelaria N° 2 de esa ciudad.

Según manifestó un familiar de uno de los internos del penal, el hecho habría sucedido en horas de la mañana del pasado 27 de septiembre. Señaló que el recluso habría sido víctima de malos tratos por parte de personal policial, en virtud de que habrían solicitado realizar un reclamo vinculado al régimen de visitas.

La fiscalía solicitó una serie de actuaciones, como un informe de la situación, nómina de personal a cargo, detalles del presunto incidente con el recluso cuyo familiar denuncia, como cualquier otro si lo hubiere.

La Unidad Carcelaria respondió, elevando los informes, y una vez tomando conocimiento de quiénes habrían sido los damnificados en el hecho, se hizo comparecer a quienes estaban a cargo, previa autorización del Juzgado de Garantías en turno.

En principio, además del recluso cuyo familiar radicó la denuncia, habrían otros más relacionados con el hecho.

El fiscal Gabriel González, a través de la Secretaría de Derechos Humanos de Metán solicitó se amplíen las actuaciones, por lo que se enviaron muestras fotográficas, un médico del CIF revisó a quienes se hicieron presentes en la dependencia. También se realizó la inspección de la unidad carcelaria, se constató el estado de los internos y se actualmente se está procediendo al análisis de material de las videocámaras del penal.

El fiscal de Derechos Humanos dispuso la continuidad de las actuaciones, tendientes a clarificar la verdad de los hechos y así tomar conocimiento cabal de lo sucedido.

Tres detenidos en la causa Jimena Salas

La Unidad Fiscal que investiga el homicidio calificado de Jimena Beatriz Salas, ocurrido el 27 de enero de 2017 en la localidad de Vaqueros, informó que se produjeron detenciones y dispuso la reserva total de actuaciones a fin de garantizar el curso de la investigación.

Oportunamente el pasado 8 de Abril el Procurador General de la Provincia Pedro García Castiella, dispuso mediante el dictado de la Resolución 1328, la creación de una Unidad Fiscal a fines de dar continuidad a la investigación del caso Jimena Salas y cumplir con la premisa constitucional del afianzamiento de la Justicia y promover la actuación de la misma en defensa de la legalidad y los intereses generales de la sociedad, como así también abastecer no solo el mandato constitucional que impone la actividad acusatoria de perseguir -debido proceso mediante- el enjuiciamiento y eventual imposición del castigo penal a él o los responsables del delito, sino también el derecho a la verdad, todo conforme a los paradigmas consagrados por la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

La resolución aludida señala que, teniendo en cuenta el estado de las actuaciones tramitadas, corresponde al Procurador General a fin de asegurar un eficiente y adecuado desempeño de las funciones acusatorias, adoptar medidas tendientes a favorecer ese rol. En ese sentido, García Castiella consideró como “indispensable” dar continuidad a la investigación del caso, estableciendo que la representación del Ministerio Público Fiscal se ejerza por magistrados e investigadores diferentes a los que hasta ahora intervinieron”. 

Fue así como la nueva Unidad Fiscal se integró por la fiscal penal especializada en Femicidios, Mónica Poma, el Fiscal Penal de Graves Atentados a las Personas, Leandro Flores y el Fiscal Penal de Derechos Humanos, Gabriel Alejandro González, quienes realizaron un análisis minucioso de los datos e informaciones ya incorporados al cuerpo del expediente, repasando y generando líneas investigativas de interés especial para someterlas a un abordaje analítico y de trabajo de campo. También se dispuso la conformación de un Equipo de Investigación Especial.

A partir de la incorporación de nuevos elementos de gran relevancia para la causa, este martes se procedió a desplegar un amplio operativo con el desplazamiento de una importante cantidad de recursos humanos y logísticos, quienes procedieron a la detención de tres personas y en el día de la fecha se cumplirá con las diligencias procesales de rigor.

La Unidad Fiscal informó además que para garantizar el avance de la investigación se dispuso la reserva total de las actuaciones desde el pasado lunes 19 de septiembre en el marco de la causa.

Policía fue condenado por vejaciones calificadas

Antonio Andrónico Guerra fue condenado a la pena de tres años de prisión de ejecución condicional. En tanto, el resto de los imputados fueron absueltos por no mediar acusación fiscal.

El fiscal penal de Derechos Humanos, Gabriel González, representó al Ministerio Público Fiscal ante la Sala IV del Tribunal de Juicio del Distrito Centro en la audiencia de debate contra los efectivos policiales Antonio Andrónico Guerra, Santiago Orlando Bejarano, Alfredo Walter Abán, Gustavo Martín Mamaní, Raúl Marcelo Cabrera y Gustavo Benjamín Monzón por vejaciones calificadas en perjuicio de Ricardo Tapia.

Finalizados los alegatos, la jueza Norma Beatriz Vera dio a conocer el veredicto por el que Antonio Andrónico Guerra fue condenado a la pena de tres años de prisión de ejecución condicional, inhabilitación especial por el término de seis años para tener y usar armas de fuego y para desempeñarse como funcionario de las fuerzas de seguridad provincial, por encontrarlo autor material y penalmente responsable del delito de vejaciones calificadas y agravadas por el uso de arma de fuego, en perjuicio de Ricardo Tapia.

En tanto, los imputados Santiago Orlando Bejarano, Alfredo Walter Abán, Gustavo Martín Mamaní, Raúl Marcelo Caberera y Gustavo Benjamín Monzón fueron absueltos por no mediar acusación fiscal.

En el mismo fallo, la jueza dispuso reglas de conducta por el término que dure la pena.

En lo que respecta a la conducta de Antonio Andrónico Guerra, quien fuera dado de baja por la fuerza policial por sanciones disciplinarias, el fiscal de Derechos Humanos había ampliado la acusación por los delitos de vejaciones calificadas por el uso de la violencia agravada por empleo de arma de fuego.

Durante los alegatos, el fiscal González solicito la condena en los términos que dictó la jueza Norma Vera y solicitó la absolución para el resto del personal policial.

Cabe recordar que Guerra llega condenado por un hecho sucedido durante la madrugada del 25 de diciembre de 2016, cuando vecinos de la plazoleta del barrio La Tablada, en medio de los festejos y saludos por Navidad y encontrándose chicos del barrio jugando, observaron a un móvil policial estacionado y efectivos uniformados que discutían con un vecino, en actitud autoritaria.

En un momento, comenzaron a hacerse disparos de ithaca (escopeta de corredera o repetición manual) en la zona de la puerta de la casa de un vecino. Fue así que salió la víctima (Tapia) a recriminar la situación y el oficial Guerra, quien portaba el arma según dichos del propio oficial y los vecinos, le apuntó en el pecho. Ante su desesperación, el damnificado tomó la punta del arma para que no le diera en el pecho y el impacto del disparo le dio en la entrepierna.

Juicio a seis policías: Finalizó la ronda de testimoniales y mañana es el veredicto

Hoy se desarrolló la última jornada de la audiencia de debate por el juicio que se sigue contra seis policías por un hecho ocurrido en 2016 en barrio La Tablada de esta capital.

El fiscal penal de Derechos Humanos, Gabriel González, representa al Ministerio Público Fiscal ante la Sala IV del Tribunal de Juicio Distrito Centro, en la última jornada de audiencia de debate contra los policías Santiago Orlando Bejarano, Alfredo Walter Abán, Antonio Andrónico Guerra, Gustavo Martín Mamaní, Raúl Marcelo Cabrera y Gustavo Benjamín Monzón por vejaciones calificadas en perjuicio de un vecino.

Tras un cuarto intermedio, hoy se reanudó la audiencia de debate, oportunidad en la que declararon vecinos que manifestaron que la noche de Navidad había muchos niños jugando en la plaza y en la canchita de barrio La Tablada, cuando comenzó una discusión con miembros de una familia de la zona, y que se escucharon gritos y disparos.

Los testigos señalaron que después de lo acontecido vieron personas heridas, uno de ellos se encontraba tirado en el piso y lastimado y que otro vecino trasladó a su hija, que había sufrido un desmayo.

Por su parte, otro testigo se reconoció en fotografías y dijo que recibió un impacto de bala de goma señalándola en una de las fotos que se le mostraron. Indicó además el lugar donde se produjo la lesión al vecino que recibió el impacto de una ithaca.

Finalizada la jornada, la jueza Beatriz Vera dispuso un cuarto intermedio hasta mañana martes 20, oportunidad en la que se hará lugar a los alegatos y posterior lectura de veredicto al finalizar la jornada.

Juicio a seis policías: Hoy declaró un perito en balística que analizó las armas

Es por por un hecho ocurrido en diciembre de 2016. Está previsto que el juicio finalice el próximo martes 20, con alegatos y lectura de veredicto.

El fiscal penal de Derechos Humanos, Gabriel González, representa al Ministerio Público Fiscal ante la Sala IV del Tribunal de Juicio del distrito judicial Centro, en la audiencia de debate contra seis policías por los delitos de vejaciones calificadas en perjuicio de un vecino.

Este viernes se continuó con la ronda de testimoniales. Prestó declaración un testigo, licenciado en balística, quien fuera el encargado de proceder al análisis de las armas: una escopeta y una pistola calibre 9 mm.

Según declaró, las municiones y el casco que le fueron remitidos, correspondían con un cartucho AT 1270, que son los que utiliza personal policial. Además brindó otras precisiones sobre la mecánica de funcionamiento del arma y señaló que las vainas servidas fueron encontradas en el lugar porque fueron percutadas (disparadas).

Posteriormente, el fiscal González amplió la acusación por los delitos de vejaciones calificadas por el uso de la violencia agravada por empleo de arma de fuego en lo que respecta a la conducta de Antonio Andrónico Guerra, quien fuera dado de baja por la fuerza policial por sanciones disciplinarias.

El hecho

La madrugada del 25 de diciembre de 2016, vecinos de la plazoleta del barrio La Tablada, en medio de los festejos y saludos por Navidad y encontrándose chicos del barrio jugando, observaron a un móvil policial estacionado y efectivos uniformados que discutían con un vecino, en actitud autoritaria. 

En un momento, comenzaron a hacerse disparos de ithaca (escopeta de corredera o repetición manual) en la zona de la puerta de la casa de un vecino. Fue así que salió otro vecino (la víctima) a recriminar la situación y el oficial Guerra, quien portaba el arma según dichos del propio oficial y los vecinos, le apuntó en el pecho. Ante su desesperación, el damnificado tomó la punta del arma para que no le diera en el pecho y el impacto del disparo le dio en la entrepierna, lo que demuestra la cercanía de quien produce el impacto respecto del lugar del impacto.

Como consecuencia de tales acciones desmedidas e injustificadas, que claramente ponían en riesgo tanto a mayores como a menores, los vecinos de la zona se manifestaron enojados y molestos con los ocupantes del móvil policial y les arrojaron piedras.

El fiscal González sostiene en las actuaciones que los imputados trataron de justificar su accionar mediante los protocolos de actuación, siendo que “el mismo protocolo recomienda que quien esté a cargo debe utilizar criterio pero sobre todo, evitar el roce y la agresión, máxime cuando su propio lema es la seguridad como compromiso y responsabilidad social”.

El fiscal de Derechos Humanos recuerda también que el protocolo, además, hace alusión expresamente al uso de armas como el último recurso y no como en este caso, en el que fuera el detonante de lo que luego se desencadenó, el disparo y consecuente lesión provocada al damnificado.

Agrega el fiscal que el protocolo recuerda que se debe pedir apoyo en caso de que el número supere a la fuerza y retirarse a una distancia considerable, a fin de evitar males mayores.

Según lo manifestado por el chofer del móvil, los efectivos salieron del lugar rápidamente y a pocas cuadras venía un refuerzo policial. De este modo se ratifican los dichos de los denunciantes de que luego de haber causado las lesiones a la víctima, no prestaron el debido auxilio a los lesionados y se retiraron del lugar, abandonando incluso a un compañero de la misma fuerza que quedó en otra zona.

Es por ello que los imputados responden  por el delito de vejaciones calificadas, que corresponde toda vez que el funcionario que desempeña un acto de servicio cometiere cualquier vejación, la que se encuentra agravada o calificada por el uso de la violencia física, la que se encuentra absolutamente comprobada en el legajo, por testimoniales, historias clínicas, fotografías e informes.