Requieren juicio para la joven acusada del homicidio de una anciana

Yamila Silvana Pinedo será llevada juicio por el homicidio calificado de una mujer de 73 años, a la que sofocó manualmente y desapoderó de sus pertenencias. El registro de las cámaras de seguridad fue fundamental para identificarla. Fue captada cuando llegó al domicilio y cuando se retiró horas después llevando una bolsa abultada.

El fiscal penal 4 de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas, Ramiro Ramos Ossorio, requirió juicio ante el Juzgado de Garantías 8 para Yamila Silvana Pinedo de 18 años por el homicidio criminis causae de Olga Evelia Hinojosa de 73 años, ocurrido en el mes de Enero de este año en Vicente López al 600.

En el requerimiento a juicio, Ramos Ossorio consigna que la acusada es hija de la empleada doméstica que colaboraba con la víctima y que mantenía trato frecuente con la anciana, situación que aprovechó para que la dejara ingresar aquel día a la vivienda.

Hace especial énfasis en el trabajo que se realizó sobre cámaras de seguridad, públicas y privadas, donde se pudo identificar cuando la acusada se hizo presente a bordo de su bicicleta en la vivienda la tarde del 12 de Enero y tras esperar casi una hora pudo ingresar. Luego se la vio retirarse cerca de las 23 en el mismo rodado y portando una abultada bolsa color blanco.

En la acusación, el fiscal sostiene que Pinedo provocó la muerte de la anciana asfixiándola en forma mecánica, pese a la resistencia que opuso la víctima y que suprimió su vida con la finalidad de poder apoderarse ilegítimamente de sus bienes, incluso de su teléfono celular.

Con las distintas medidas probatorias realizadas, se desestimó que se tratara de un accidente doméstico y se determinó que las lesiones que presentaba eran compatibles con un ataque producido por un tercero y que evidenciaba signos de haber intentado repeler a su agresora. El informe de autopsia revela que Olga Evelia Hinojosa falleció por asfixia mecánica mixta.

Ramos Ossorio sostiene que Pinedo orientó su accionar deliberado a causar la muerte de  la septuagenaria por un medio idóneo para tal fin, la sofocación, valiéndose del factor sorpresa, de la confianza que la misma le dispensaba, de la superioridad y preponderancia de condiciones físicas en relación a la víctima dada su edad, su porte y envergadura, todo ello con la finalidad de desapoderarla ilegítimamente de efectos de su propiedad y lograr impunidad por tratarse de una persona conocida de la víctima.