El fiscal penal de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas de Tartagal, Pablo Cabot, representó al Ministerio Público Fiscal en el juicio en el que Gustavo Daniel Cuéllar, alias “Calandra”, fue condenado por el Tribunal de Juicio Sala II Vocalía I del Distrito Judicial Norte, a la pena de 9 años y 6 meses de prisión efectiva, por el delito de homicidio en grado de autor, en perjuicio de Fortunato Matorras.
El mismo fallo ordenó que Cuéllar, de 40 años, sea trasladado a la Unidad Carcelaria 5 y que una vez que quede firme la sentencia, se extraiga material genético del condenado por el servicio de Biología Molecular del CIF para posterior inscripción en el registro del Banco de Datos Genéticos.
La intervención del fiscal penal Pablo Cabot, se produjo tras los hechos ocurridos el 26 de octubre de 2019, cerca de las 2, cuando la víctima y el acusado bebían alcohol en un terreno baldío ubicado en la intersección de avenida Rivadavia con calle Libertad, de Aguaray.
En un determinado momento, Cuéllar agredió físicamente con golpes a Matorras, quien una vez en el piso, fue golpeado repetidamente con un hierro por el acusado y recibió golpes en la cabeza que le produjeron la muerte.