Los cuatro hechos sucedieron en la carpa bailable de la localidad de Chicoana, en uno de los cuales una de las asistentes y damnificada resultó golpeada. Se solicitó mantenimiento de detención.
Según las constataciones efectuadas, los hechos ocurrieron la madrugada del pasado 21 de febrero, mientras los damnificados se encontraban en la Carpa Los Cardones de esta localidad.
Uno de los hechos sucedió mientras la denunciante se encontraba junto a su marido y otras tres mujeres. Al caminar por el costado de la pista de baile, se interpuso un hombre que le dificultó el paso. Cuando quiso tomar su teléfono celular se dio cuenta que ya no lo tenía en la riñonera y que el cierre estaba abierto.
El segundo hecho tuvo lugar cuando el denunciante que se encontraba junto a un grupo de amigos, se dirigió a la barra y al regresar se percató que le habían sacado su teléfono celular a él y uno de sus amigos. El hombre tomó conocimiento por la red social facebook que la policía había secuestrado varios teléfonos, entre ellos el suyo.
El tercer caso se produjo cuando otro de los damnificados volvía de la barra del local, con ambos brazos ocupados y al llegar al punto donde se encontraban sus amigos, se dio cuenta que ya no tenía su celular en el bolsillo del pantalón. Según dijo, en ningún momento observó o sintió algo que lo hiciera sospechar.
En tanto, el cuarto caso corresponde a una damnificada que se encontraba junto a su pareja en el evento bailable. Al finalizar, se dio con que su teléfono ya no estaba en su mochila.
El fiscal penal de Cerrillos, delegación El Carril, Federico Portal, imputó de manera provisional por la presunta comisión de los delitos de hurto (cuatro hechos) y robo en poblado y en banda, en calidad de autor, a dos hermanos, un hombre y una mujer de 25 y 23 años, respectivamente.
Los acusados, junto a una tercera persona, aprovecharon el descuido de los damnificados y habrían sustraído, de forma ilegítima, los teléfonos celulares de estos. En cuanto a la acusación de robo en poblado y en banda, se habría consumado cuando otra damnificada que se encontraba con su familia recibió un golpe de puño que la hizo caer al piso y se supone que fue en ese momento que aprovecharon para abrir el bolso y apoderarse de 4 teléfonos celulares. La denunciante expresó que vio que se trataba de un grupo de personas y señaló como cabecillas a una mujer y un hombre.
Durante la audiencia de imputación, ambos acusados se abstuvieron de declarar. Por su parte, el fiscal Portal solicitó, ante el Juzgado de Garantías en turnos, mantenimiento de detención.