La Sala II del Tribunal de Juicio del distrito Centro tendrá a su cargo juzgar a la mujer acusada de la muerte de su hija de dos años. Se requirió juicio a principios del mes de octubre y la audiencia de debate se desarrollará entre el 28 de abril y el 5 de mayo de 2022.
La fiscala penal de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas, Verónica Simesen de Bielke, tras la elevación a juicio de la causa por el homicidio calificado por el vínculo de una niña de dos años, realizada por el Juzgado de Garantías 7 del distrito Centro, fue notificada por la Sala II del Tribunal de Juicio del distrito Centro, de la fecha de inicio de la audiencia de debate contra Micaela Noemí Colque.
Según lo fijado por el Tribunal, la audiencia se desarrollará entre el 28 de abril y el 5 de mayo de 2022 durante la mañana.
La
mujer inicialmente estuvo imputada por el delito de abandono de persona seguido
de muerte pero luego, con los elementos de convicción reunidos, se agravó la
acusación.
La decisión de Simesen de Bielke de agravar la acusación contra la joven, obedeció a que, del desarrollo de las tareas investigativas, surgió que la acusada dejó a la niña de tan solo dos años, sola a su suerte en su vivienda desde el domingo 20 de junio de 2020 hasta el hasta el lunes 21 en horas de la noche cuando, presuntamente regresó a su domicilio. Tales circunstancias permiten sostener que la acusada debió representarse el resultado luctuoso al dejar a una niña sola, encerrada en una habitación, durante dos días consecutivos sin ninguna posibilidad de asistencia.
En el
requerimiento, Simesen de Bielke sostiene que Colque, al advertir que la niña
no respiraba, la llevó hasta el Centro de Salud, informando que mientras se
encontraba consumiendo yogur con galletas, se había ahogado. Sin embargo surge
de las actuaciones, que al presentarse la acusada en dicho centro de salud, la
menor ya no respiraba y que se encontraba con una temperatura corporal baja.
De las declaraciones testimoniales recabadas se confirma que la acusada se ausentó de su vivienda por espacio de dos días y dejó a la menor encerrada en la habitación, con la televisión prendida, sin posibilidad alguna de sustento alimentario ni cuidado por parte de un adulto, produciéndose su deceso. Sumado a ello se tiene que del informe de autopsia, la menor presentaba una serie de lesiones corporales que denotan el maltrato físico al que era sometida.