El personal de la Asociación Civil Escuela Canina de Catástrofe (ACCEC) que tomó parte en las tareas de búsqueda de Paola Mariana Álvarez, realizó ayer pericias en uno de los vehículos secuestrados al principal sospechoso, donde se lo vio movilizarse los días posteriores a la desaparición y se detectaron rastros de Zambrani y de la joven en la camioneta.
En el marco de las tareas de investigación y búsqueda que se llevan adelante ante la desaparición de Paola Mariana Álvarez, ayer se realizó una pericia de detección odorológica en una camioneta Volskwagen Amarok blanca que se encuentra secuestrada y que es propiedad de los padres de Santiago Zambrani.
Durante la investigación se pudo constatar que luego de que la joven ingresara en una motocicleta al inquilinato donde vivía Zambrani y no se la viera salir, el sospechoso se movilizó en varias oportunidades en dicha camioneta junto a su madre y también solo.
El perro “Eléctrico”, entrenado por los expertos de la Asociación Civil Escuela Canina de Catástrofes (ACCEC) hizo rastreos odorológicos sobre elementos secuestrados como evidencia en la causa y todos arrojaron resultado positivo. En primer lugar, el can detectó rastros odorológicos de Paola Álvarez en la camioneta y luego, con la presencia del principal imputado, se detectaron los suyos en el mismo vehículo.
Toda la medida, que se realizó en instalaciones de la Ciudad Judicial de Salta, estuvo coordinada por el fiscal penal 4 de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas, Ramiro Ramos Ossorio, y contó con la presencia de personal policial, testigos y el principal imputado, Santiago Zambrani.
La pericia realizada se realizó con estrictas pautas de control y cuidado ordenadas por los expertos con el fin de evitar cualquier tipo de contaminación en las muestras y en el resultado.