Un hombre pasará 3 años y 6 meses en prisión por ejercer, de manera sistemática, violencia contra su ex pareja, violación de domicilio y desobediencia judicial.
La Sala 2 del Tribunal de Juicio de Orán condenó a un hombre a la pena de tres años y seis meses de prisión de cumplimiento efectivo por los delitos de lesiones leves agravadas por mediar relación de pareja y violencia de género, amenazas, violación de domicilio y desobediencia judicial (cinco hechos).
La fiscal de Violencia Familiar y de Género de Orán, Soledad Filtrín Cuezzo, representó al Ministerio Público Fiscal durante el juicio y solicitó que el hombre fuera condenado a siete años de prisión, mientras que la querella había solicitado ocho años.
Sobre el hombre pesaban numerosas denuncias de violencia de género desde 2019, violación de domicilio y desobediencia judicial radicadas por su expareja.
A lo largo del juicio, Filtrín Cuezzo narró los distintos hechos de violencia y hostigamiento a los que fue sometida la mujer por parte de su expareja durante años.
En junio de 2021, el hombre le reclamó a la mujer por qué le daba de comer lentejas a su hija. Ante la respuesta de que él no pasaba cuota alimentaria por lo que no podía opinar, el condenado reaccionó de manera violenta, tomándola del cuello y arrojándola sobre la cama. Ante la intervención de un hermano de la víctima, el hombre finalmente desistió de su ataque. Fue detenido y alojado en la comisaría.
En sede fiscal, la mujer contó que en septiembre de 2019, el hombre ingresó a la vivienda y la obligó a mantener relaciones sexuales en contra de su voluntad. Aseguró que no había denunciado el hecho por miedo y vergüenza.
La fiscal Filtrín Cuezzo también lo acusó de abuso sexual con acceso carnal, delito que fue desestimado por la jueza Laura Toledo de la Sala 2 a la hora de dictar sentencia.