Dos hombres fueron imputados en forma provisional por el delito de estafa en perjuicio de un empresario, al que le habrían vendido ganado por una suma superior a los cuatro millones de pesos. Los animales fueron decomisados porque el documento para el traslado y comercialización otorgado se encontraba adulterado.
Los fiscales penales de Rosario de la Frontera, Oscar López Ibarra y Nicolás Rodríguez López, en el marco de la investigación que llevan adelante por la denuncia de estafa que realizó un empresario agropecuario, imputaron provisionalmente a un hombre de 57 años y a su hijo, también mayor de edad, por la posible comisión del delito de estafa.
El damnificado denunció que realizó una compra de hacienda valuada en más de cuatro millones de pesos a los acusados y a otras dos personas y que cuando los camiones que transportaban el ganado fueron interceptados en un control, el SENASA procedió al secuestro de lo transportado porque el documento autorizado para el traslado y comercialización del ganado (DTE) que le habrían entregado los vendedores, presentaba adulteraciones. El ganado secuestrado fue decomisado y sacrificado en un matadero.
Ante el pedido de los fiscales, el Juzgado de Garantías interviniente libró además orden de detención para otras dos personas vinculadas a la investigación.
Los acusados estuvieron acompañados de un defensor particular, se abstuvieron de declarar y señalaron que lo harán por escrito.
Cabe recordar que inicialmente se abrió una instancia de mediación, la cual fracasó y ante la falta de acuerdo de las partes, se dio por concluida.