El fiscal penal de UNICROH, Pablo Rivero, imputó a los integrantes de una banda que se dedicaba al robo de cubiertas de vehículos, bicicletas de alta gama, estéreos, reducción de motos y otros elementos. La investigación incluyó diferentes informes, transcripciones de audios y tareas de campo, que permitieron identificar a los integrantes.
Los operativos dirigidos por el fiscal Rivero, contaron con el aporte del director de Investigaciones de la Policía de la Provincia, Emilio Albornoz, e integrantes de la División Robos y Hurtos de la Brigada de Investigaciones, quienes participaron de los veinte allanamientos y tras los cuales, Rivero imputó a Roque Javier Uncos por el delito de asociación ilícita agravada en concurso real con robo simple y Juan Carlos Díaz Ibarra alias “Puchi”, por asociación ilícita agravada, hurto simple, robo simple y robo calificado, todo en concurso real. A través de audios transcriptos y las tareas investigativas, se determinó que ambos eran jefes u organizadores de la banda delictiva.
El fiscal también imputó a Dan Alí Xavier Pérez Arenas por el delito de asociación ilícita, robo simple y robo calificado en concurso real.
A su vez, Luis Rodrigo Nina, Cintia Cecilia Guanca y Marcial José Álvarez, fueron imputados por el delito de asociación ilícita en concurso real con encubrimiento agravado.
Por último, Pastor Alberto Benítez fue imputado por el delito de asociación ilícita, mientras que Antonio Rodríguez alias “Gringo”, Reinaldo Genaro Luna arias “Don Luna” y Ramón Nonato Torres alias “Don Ramón”, fueron imputados por encubrimiento agravado.
Tras analizar durante meses las diferentes intervenciones telefónicas, se estableció que los sindicados integraban una organización criminal dedicada a cometer diferentes delitos, entre los que se destacan el robo de ruedas de vehículos, bicicletas de alta gama, estéreos, reducción de motocicletas y otros tipos de elementos, bajo la modalidad “violentadores”.
En la imputación, Rivero consideró que estos delitos “afectan en sí mismo la tranquilidad de la población en general, porque son una amenaza para la seguridad personal y agregan una mayor cuota de alarma social”.