Para la Fiscalía, las pruebas reunidas a lo largo de investigación, permitieron dejar acreditada la participación delictiva de Kuldeep Singh y sus cómplices en el robo a mano armada a la empresa Nutribras SA. “Singh cumplió un rol protagónico” afirmó el fiscal Federico Jovanovics, de la Unidad Fiscal contra Robos y Hurtos en su requerimiento a juicio.
Tras tres meses de diligencias y otras medidas tendientes a reunir pruebas en torno al asalto a la firma Nutribras SA, ubicada en el Parque Industrial de la ciudad de General Güemes, el fiscal elevó al Juzgado de Garantías 5 en feria, el pedido formal de juicio en contra del ex diputado provincial por Rosario de la Frontera, Kuldeep Singh.
En su escrito, Jovanovics sostuvo que “quedó acreditado con claridad la autoría de Kuldeep Singh, ya que cumplió un rol protagónico, junto a los otros imputados y coautores, los hermanos Claudio y Cristián Romano, Marcelo Medina, Ariel Arias, Juan Lujan y Víctor Uncos, en el robo a mano a armada a la empresa”.
“Cabe tener en cuenta el comportamiento y la peligrosidad de los causantes, que de acuerdo a lo captado por las cámaras de seguridad, ingresaron al establecimiento con un arma de fuego y redujeron al sereno de manera violenta. Además, según el registro de las filmaciones y las constancias de la causa, Kuldeep Singh debió organizar el despliegue delictivo previamente, para así poder disponer de personal y de varios vehículos de su propiedad, camiones, camionetas autoelevadores, uno de ellos incluso abandonado por problemas técnicos en la estación de servicio El Jagüel de Güemes.”, agregó.
En vista de estos elementos y otras pruebas obtenidas durante la investigación, el fiscal solicitó al Juzgado de Garantías que se avance con el juicio en contra de Singh, Medina y los hermanos Romano por los delitos de “privación ilegítima de la libertad agravada y robo doblemente calificado por el uso de arma de fuego y por ser cometido en poblado y en banda”.
Por otra parte, requirió que Arias, Luján y Uncos respondan por el delito de “robo doblemente calificado por el uso de arma de fuego y por ser cometido en poblado y en banda”. El avance de la causa, ahora quedó bajo la órbita del Juzgado de Garantías.
Primer encuentro
Los delitos endilgados, tanto a Singh como a sus tres empleados, surgen de un hecho registrado el 26 de octubre del año pasado, cuando el entonces diputado citó en el supermercado KUVEFA de su propiedad, a Jonathan Diez, quien tenía vínculos con Nutribras SA.
En un mensaje a Diez vía whatsaap, Singh dejó en claro la cita: “hola Jonathan, buen día espero que vengas, no hagas que vaya a buscarte”. El encuentro era para reclamarle por una serie de cheques sin fondos de la empresa Nutribras SA, y que no iba a perder ese dinero. Adelantó que iba a contactarse con unos “tucumanos” y que éstos iban a encargarse del cobro.
Singh programó viajar con Diez ese mismo 26 de octubre a las 11.30 y pasó a buscarlo por su casa en Rosario de la Frontera. Singh llegó en una camioneta VW Amarok gris oscura conducida por Medina, tras lo cual se dirigieron hasta la estación de servicio YPF “Futuro II”, de esa ciudad.
Allí, Singh descendió y caminó hasta otra camioneta Amarok blanca, donde ascendió y a los minutos regresó con un sujeto. Se trataba de Claudio Romano, quien se acomodó en el asiento trasero junto a Diez, a quien amenazó con un arma de fuego, la que mantuvo apuntándole al estómago al empleado.
Romano le dijo que “hablaba” el idioma de la calle y que se iban a cobrar la deuda del diputado Singh. Estos movimientos, más allá de la denuncia de Diez, fueron comprobados a partir de las imágenes de cámaras de video en la estación de servicio.
En su testimonial, Diez sostuvo que “apenas salimos a la ruta el señor de remera verde, el gordo (Claudio Romano), saca del bolsito una pistola de color negra con tambor, y la gira hacia mi lado y me la apoya en el lado de la cintura y ahí me dice “nosotros hablamos el idioma de la calle”, que ellos se querían cobrar la de ellos(…),(…)que los cheques se los había entregado Kuldeep, ellos decían que sabían dónde vivía mi familia y mi hermana en Salta…yo tenía que colaborar y que no me iba a pasar nada”, sostuvo Diez.
El asalto en Nutribras
Al llegar a las instalaciones, Diez es obligado a revelar algunos movimientos de la empresa, aunque en este punto, el testigo indicó que Singh, quien tuvo una participación activa en todo momento, adujo que conocía en horario de entrada y salida de los empleados.
Este detalle indica para la Fiscalía, que el ex diputado realizó una tarea de inteligencia previa a fin de disponer luego la logística del golpe. No obstante y para mayor seguridad, Romano y Singh le ordenaron a Diez que llamara por teléfono a uno de los empleados a fin de verificar los datos que tenían sobre la empresa.
Tras esperar unas horas, hasta las 18, el ex diputado volvió a ordenarle a Diez que hiciera de señuelo para que el sereno abra el portón de las instalaciones, lo que Juan Vidal Leiva hizo al ver que se trataba de Jonathan, cuando la camioneta se acercó.
Luego de abrir el portón, Romano redujo al sereno y Singh y su banda tomaron el control de las instalaciones, oportunidad en que cortaron el cable de las cámaras de video, aunque no de todas, pues algunas quedaron en funcionamiento y las imágenes almacenadas, permitieron luego develar detalles del asalto.
Luego, y tras privar de la libertad de manera ilegítima a Diez y Vidal Leiva, lo que siguió fue un despliegue que derivó en el robo de numerosos bienes, para lo cual Singh contó con la complicidad de Arias, Luján y Uncos, quienes llegaron con camiones pertenecientes al entonces diputado provincial.
Con elevadores, Singh y su banda se apoderaron de ilegítimamente de los siguientes bienes de la planta procesadora “NUTRIBRAS”: (01) Electrónica mca sortex color blanca, (01) máquina procesadora de poroto, mca. sortex, modelo buhler, color blanca; (02) envasadoras, mca. carlini, color gris; (02) maquinas cosedoras, mca. echevere, color azul; (12) palets completos de bolsas, conteniendo en su interior bolsas, mca «Nutribras”; (01) zamping eléctrico, no recuerda marca, color naranja con negro; (01) máquina para sellar plástico, no recuerda marca, color verde, de tamaño pequeño; (01) hidrolavadora, mca. black deker, color naranja; (01) taladro percutor, mca. stanli, color amarillo; (01) televisor. mca. samsung, 32”, color negro; (01) palet con bolsas vacias mca «nutribras», por cada palet 10.000 bolsas, (01) compresor chico mca no recuerda color azul tirando a celeste, (01) enfiladora de lenteja no recuerda caracteristicas, (02) cajas de silo bolsa color blanca, (01) soldadora mca gama color verde, (02) barredoras a combustible una mca black decker y otra mca gama, ambas de color naranja, (01) taladro percutor mca stanley color amarillo, (17) rollos film mca marolio, (01) maquina de coser a manual mca no recuerda color gris, (01) amoladora mca gama color amarilla, (01) tablero completo con herramientas (llaves de ajuste, etc), (01) caja de llaves completos color roja, (01) balanza manual mca no recuerda, color azul, (01) cargador electrico zamping, (01) bolsón de bic bac de cables de diferentes medidas, (01) cinta pateadoras de bolsas, (01) bomba de agua chica mca no recuerda, (01) manguera para incendio, (01) balde de 20 litros y (04) cajas conteniendo en su interior algas marinas.-
Rol protagónico
Tras evaluar las pruebas y declaraciones reunidas, el fiscal concluyó que “la hipótesis de que el accionar de los incoados: Singh, Claudio y Cristian Romano, y Medina, además de privación ilegítima de la libertad agravada, queda configurada la figura típica de robo doblemente calificado por el uso de arma de fuego y por ser cometido en poblado y en banda, participando también de este último delito referido, los sindicados: Arias, Luján y Uncos.”.
Entre otras pruebas, la fiscalía destacó las filmaciones secuestradas. En las mismas, el fiscal indicó que se advierte con claridad a “Singh, en todo momento dar indicaciones sobre que maquinaria cargar, dialogar con Claudio Romano, quien portaba el arma de fuego; a pocos metros a Lujan manejar un “sampi” cargando mercadería de la empresa Nutribras; al imputado Arias dirigir los camiones, que con posterioridad Uncos se llevaría de la empresa Nutribras hacia un galpón de Kuldeep Singh, en Rosario de la Frontera.”.
Asimismo, indicó que el propio ex diputado, ante la trascendencia mediática del asalto, devolvió voluntariamente el botín robado. Y lo hizo “una vez que se encontró acorralado, por lo que todo esto no hace más que confirmar, que Singh participó en este raid delictivo ocurrido el día 26 de octubre, en complicidad con los hermanos Romanos y los Sres. Arias, Lujan y Uncos.”.
En vista de estas, y otras pruebas reunidas a partir de las diligencias solicitadas desde la fiscalía y en las cuales los investigadores de esa Unidad tuvieron un papel muy importante, el fiscal solicitó avanzar con el juicio en contra de los acusados.