Días antes del brutal asalto, el delincuente se había presentado a pedir trabajo pero no quedó. El robo lo cometió junto a un cómplice en un depósito de muebles de barrio Santa Lucía. Tras ser identificado, cayó detenido. Se le imputó el delito de robo agravado y es investigado por otros presuntos hechos.
La detención de Emanuel Alejandro “Cuco” Carrizo de 27 años, se registró en los últimos días a partir de una investigación llevada adelante por policías del Sector 5, quienes luego de una serie de diligencias dispuestas por la Fiscalía Penal 5, a cargo de la fiscal Gabriela Buabse, lograron capturar al acusado.
El violento asalto, según lo informado desde la fiscalía, ocurrió el 13 de marzo pasado a las 19.30, cuando Carrizo junto a un cómplice, quien aún no pudo ser detenido, llegó a un depósito de muebles ubicado en la calle 14 al 2400, en el barrio Santa Lucía.
De acuerdo a lo investigado y las pruebas reunidas, la fiscal estableció que fue Carrizo, quien irrumpió en el local tras dañar un portón de acceso que da al río Arenales. El acusado, quien tiene un frondoso prontuario, llevaba como arma una barra de hierro del 14.
Con este elemento, el sujeto atacó a la pareja del propietario del depósito, José López, quien fue el que alertó al 911. Carrizo agredió con el hierro en la cabeza de la mujer, quien resultó con una grave herida, la que ocasionó un grave sangrado y más de seis puntos de sutura.
Luego de maniatar a la mujer con un cable, Carrizo se apoderó de un televisor de 60 pulgadas, un teléfono celular y un par de zapatillas. Con este botín, escaparon en dirección al asentamiento La Rivera, colindante con las márgenes del río.
Al salir en busca de los ladrones, la policía no los pudo hallar, aunque sí encontró oculto en unos matorrales el televisor robado. De las testimoniales, tanto de la mujer golpeada como del propietario del depósito, se pudo establecer que Carrizo había visitado días antes el local, puesto que habían puesto un aviso de vacante para tomar un empleado.
Para la policía no fue difícil identificarlo, puesto que presenta un prontuario con cerca de diez causas penales, todas por delitos contra la propiedad. Por su parte, la víctima del grave ataque propinado por el acusado, sostuvo que a los días vio al sujeto en inmediaciones del barrio Santa Lucía, oportunidad en que se burló de la mujer.
Tras varias pesquisas, la policía finalmente pudo encontrar el escondite de este sujeto, en un barrio de la zona sudeste, en la casa de un familiar. La fiscalía solicitó el allanamiento y detención del acusado, quien fue reconocido por la víctima del asalto.
Aunque no se logró recuperar el resto de los elementos robado, la fiscal entendió que existen suficientes pruebas contra Carrizo, por lo que imputó al mismo el delito de “robo agravado por el uso de arma”. En la audiencia de imputación, el detenido reconoció que conocía el lugar, ya que fue a pedir trabajo, pero negó haber cometido el asalto.
Pese a ello, y en vista de que fue reconocido por la mujer agredida, la fiscalía solicitó la prisión preventiva y avanza con las actuaciones para llevar a juicio a Carrizo, en tanto, se sigue adelante también con la búsqueda de su cómplice.