Un hombre de 32 años fue condenado en juicio abreviado por abuso sexual con acceso carnal agravado por la guarda y la convivencia en perjuicio de una menor de edad, hija de quien fuera su pareja y que padece retraso madurativo. Estuvo prófugo y tras su detención, se realizaron cotejos genéticos que permitieron comprobar su autoría.
La fiscal penal 3 de la Unidad de Delitos contra la Integridad Sexual, Cecilia Flores Toranzos, solicitó con el acuerdo de las partes, juicio abreviado ante la Sala I del Tribunal de Juicio para un hombre de 32 años, acusado de cometer actos de abuso sexual en perjuicio de una menor de edad, hija de quien fuera su pareja.
Los abusos se conocieron cuando la menor, que padece retraso madurativo, resultó embarazada. Se realizó la denuncia y el acusado decidió evadir el accionar de la Justicia. Tras permanecer prófugo algunos meses, fue detenido y con la realización de diversos exámenes y cotejos, se pudo comprobar su autoría en el hecho.
Tras recibir la confesión del acusado y la aceptación de los hechos, el juez Federico Armiñana Dohorman lo condenó a la pena de 10 años de prisión por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por la guarda y la convivencia y en el mismo fallo, dispuso que se le extraiga material genético por parte del Servicio de Biología Molecular del Departamento Técnico del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF), previa asignación del Dato único de Identificación Genética (DUIG), para su incorporación en el Banco de Datos Genéticos.